[Ingrid]

Que tal todos!!!

Acá les escribo desde un hospital en algún lugar de gringolandia, ya muy recuperada y con las ganas de volver nuevamente a mi vida cotidiana. Sé que me salvé de una buena y que aun no es mi hora. Recibí 3 impactos de bala de los cuales el más riesgoso era el que perforó mi pulmón. Pero bueno mejor les cuento la historia...

Sucede que por mi trabajo tuve que ir a una zona un poco peligrosa y alejada de Managua, fuimos muy bien escoltadas pero con esta inseguridad mundial ya no se puede estar a salvo. Y unos tipos nos secuestraron llevándonos a un lugar descampado; los secuestrados fuimos dos mujeres y un varón. Como a los tres días de estar solo a pan y agua, metidos en una habitación húmeda y escalofriante decidimos que teníamos que escapar pero la decisión tenía que ser unánime por lo que a plena madrugada (previo planeamiento de nuestras acciones la noche anterior) pudimos fugar pero no sin antes ser divisados por nuestros raptores quienes de manera cobarde mataron a mi compañero y compañera con certeros y lapidarios disparos. Eso fue todo para que yo me detenga y empiece a maquinar una catarsis, la cual nunca se concretó.
De nuevo volví al cuarto oscuro en el cual quisieron abusar de mí y de no poder y sintiéndose frustrados, los criminales comenzaron a propinarme una lluvia de golpes, hasta que uno de ellos que observaba dijo que yo de nada servía muerta o mutilada y que me dejen en paz hasta que venga “el jefe” y que incluso él estaría muy molesto por que asesinaron a los otros dos rehenes.

Luego de eso yo caí en un shock nervioso y me dejaron sola, encerrada y atada de manos. Al día siguiente llegó “el jefe” y se entrevistó conmigo para que le dé datos, sobre mi nombre, nacionalidad, etc. y algún teléfono de mis familiares. No le dí ni un puto dato fidedigno del cual él se sirva para extorsionar a la familia que yo amo. Estaba resignada a morir en batalla y con la frente en alto.

Luego de dos días o más (a mi me parecieron meses) todos se fueron para comenzar a hacer sus contactos y solo me dejaron al cuidado de uno de ellos. Esa era mi única oportunidad, no habría más -pensé- y empecé a ver que se podía hacer. Concluí que cualquier plan que tuviera no podría ser llevado a cabo y que solo me quedaba improvisar en la marcha, por lo cual tenía que llamar primero su atención y esperar una distracción la cual me permita fugar. Ya desde días antes él venía de fisgón a verme todas las noches mientras yo -según él- estaba dormida y se masturbaba viéndome.

Así fue como le supliqué que necesitaba una regadera para poder asearme y que no tenía ningún inconveniente si él me vigila mientras lo hacía -el 0te ni corto ni perezoso aceptó mi petición- mientras me desnudaba una gruesa lágrima rodó sobre mi mejilla y pensaba si realmente vería un nuevo día más de mi vida y esperaba que pase lo que pase mis padres, hermanos, amigos y demás familiares no sufran.

Empecé a asearme y la cara del tipo, que no sacaba la vista de mi cuerpo, me daba asco y a propósito me resbalé y se levantó para ayudarme, una vez que me dio la mano y estuve de pie y con buen equilibrio lo empujé con toda mis fuerzas y con mucha adrenalina solo aventé fuera mi ropa y cerré la habitación con el criminal dentro. Era mi única y última oportunidad y no la desperdiciaría, solo me puse las zapatillas y empecé a correr sin mirar atrás y sin rumbo hasta casi llegar a un rio cuando de pronto siento un fuerte punzón en mi hombro acompañado de una quemazón; es cuando caigo en la cuenta de que me perseguían y a la distancia me hirieron. Caigo al suelo y sin pensarlo me levanto repentinamente para seguir corriendo, segundos más tarde siento otra quemazón –ya me jodí- pero era tanta la adrenalina que mantenía mis músculos para seguir hasta que el tercer disparo me dejó sin aire y caí al rio para ser llevada por la corriente.
Con el instinto para sobrevivir y engañarme a mi misma diciéndome que saldría de esta, saqué mi cabeza a flote para no ahogarme y calculo que fui arrastrada rio abajo por no menos de 10 minutos, cuando las aguas ya estaban más calmadas y ya con la poca fuerza que me quedaba me dirigí hacia la orilla y me puse en pie en donde un señor viéndome desnuda, magullada y ensangrentada solo atinó a decir vámonos de aquí le dije que me lleve lejos y que cualquier lugar sería bueno, pero lejos; el dijo “no se preocupe niña” y de allí más no recuerdo hasta que desperté en plena cirugía por unos instantes y luego nada más hasta que vi el rostro de mi padre y un poco más atrás el de mi buen amigo y forero Rodney “siemprecaleta”.
Pensé que todo fue una pesadilla o que simplemente me había pasado de tragos luego de una noche fresca de noviembre pero lo bueno es que estaba de nuevo para seguir en esta vida.
Les agradezco a todos por las palabras de aliento y bueno también por el “seudo pésame” jajjaja en verdad chicos y chicas muchas gracias a todos.
Más detalles les iré respondiendo conforme pase el tiempo.
Que Dios nos de salud y bienestar a todos!!!