Partido de la jornada 21 que fue suspendida en su momento por problemas con el techo del Estadio Balaídos.
El Real Madrid necesita sacar como mínimo un empate para llegar con aspiraciones de título y seguir dependiendo de sí mismo en la última jornada cuando se enfrenten al Málaga, una derrota dejaría servida la mesa al Barcelona para ser campeón, partido crucial.
El Celta por su parte al quedar eliminado de la Europa League no se juega ya nada y todo apunta que jugará con sus titulares.